Año 3 & 16, número 13
Publicado: 24 de enero de 2011 y 31 de enero de 2024
Dedicado a
nitya-līlā praviṣṭa oṁ viṣṇupāda
Śrī Śrīmad Bhakti Prajñāna Keśava Gosvāmī Mahārāja
Inspirado por y bajo la guía de
Śrī Śrīmad Bhaktivedānta Nārāyaṇa Gosvāmī Mahārāja
Cuida a Dios
Tenemos cierta independencia, pero esa independencia no debe permitirse de manera que restrinja al Maestro. A nosotros se nos permiten algunas cosas específicas para nuestro uso, mientras que Él tiene dominio sobre todo. Por lo tanto, no debemos pensar en Él como pensamos en los seres que Él creó. Cuando el Absoluto quiere algo, estamos moralmente obligados a ofrecerle nuestros servicios y atender a Sus necesidades. Si Él piensa que es el Esposo, todos debemos ser Sus esposas. El alma debe vestir su cuerpo según el gusto de su Esposo; debe vestirse de tal manera que complazca a su Amo.
No debemos pensar que la Divinidad debe ser un agente predominante para servir a nuestro propósito. No podemos imponernos por encima de Él. No tenemos permiso para hacerlo. No somos capaces de hacerlo. Siendo infinitesimalmente pequeños, no tenemos el poder de tenerlo como nuestro subordinado. No debemos pensar que Él debe ser nuestro padre y servirnos, como vemos que hacen nuestros padres terrenales desde el principio de nuestras vidas. Debemos servir y adorar a Bala Kṛṣṇa, el niño Kṛṣṇa, como Sus padres:
"No necesito repasar los Vedas, no necesito leer el dharmaśāstra y el Mahābhārata para aliviar mis problemas. Que sean las personas temerosas de los problemas mundanos las que lean los Vedas y demás. Yo no temo en absoluto esas cosas. No creo que la tendencia pesimista de mi mente deba llevarme a leer esos libros. Son intercambios sin vida. Yo quiero algo vivo. Veo que Nanda, como padre, tiene el privilegio de nutrir y criar al niño Kṛṣṇa desde el principio. Así que me interesa más tener a Nanda como preceptor que a estos śāstras"*.
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* C.f. Padyāvalī (126) o Śrī Caitanya-caritāmṛta (Madhya-līlā 19.96) – “śrutim apare smṛtim itare”
El niño Kṛṣṇa se encuentra gateando en el corredor de la casa de Nanda. Yo también voy a adorarle como Su padre sirviente. Por lo tanto, el padre servidor debe ser mi preceptor.
No debo pedirle que sea mi amigo, sino que debo entablar amistad con Él. Es decir, debo prestarle servicio como amigo. También me gustaría ser conocido como Su amigo confidencial, no como un amigo venerable. Los aduladores suelen halagar a sus amos haciéndose pasar por amigos. Yo no debería ser su amigo adulador. Me gustaría ser Su amigo confidencial. No dudaré en ofrecerle cualquier comida que haya probado de antemano solo para asegurarme de que tiene buen sabor.
Si encuentro que la comida es agradable, entonces la ofreceré al Señor Supremo. Nuestro venerable amigo no permitiría tal conducta, que es totalmente contraria a las ideas de los adoradores reverenciales del Señor. Incluso Śrī Rāmānujācārya siguió las reglas de la adoración reverencial. Pero Śrī Kṛṣṇa Caitanya nos ha dicho que debemos ser Sus amigos confidenciales en lugar de hacernos pasar por amigos y, al mismo tiempo, mantener un humor reverencial. El ambiente reverencial pone una especie de pantalla ante nosotros.
Śānta-rati es el sentimiento de neutralidad. El Absoluto tiene derecho a recibir los diferentes servicios prestados por Sus sirvientes. El Señor dice: "Siempre estoy dispuesto a recibir el servicio de Mis sirvientes de cualquier manera que se ofrezca".
La gente común no entiende lo que es la religión. La mayoría de la gente, exceptuando la escuela de la devoción, daña la causa del servicio. Jñānīs desean fundirse con la Personalidad de Dios. Los budistas piensan que pueden librarse de todas las miserias aniquilándose a sí mismos. Los heno-teístas piensan que, a la larga, alcanzarán un estado en el que no existe ningún rasgo manifiesto o denominativo. Los devotos llaman a esas personas no devotos, ateos, escépticos, etc.
Hay karmins (los que se dedican a actos fruitivos) o karmavirs ( karmins heroicos) que son capaces de hacer muchas cosas. Declaran que tienen un objetivo definido por el que trabajan. Sin tal objetivo serían llamados frenéticos o locos. Todos ellos son asalariados o contratistas, y realizan su trabajo para obtener algo a cambio. Los agnósticos, en cambio, no se preocupan por esas cosas. Quieren perderse, quieren suicidarse. Esas personas no son devotas. La concepción de un devoto es muy diferente de las concepciones ordinarias de los hombres en general. La escuela devocional siempre busca el interés del Absoluto. No se clasifican a sí mismos como karma-kāṇḍīs o jñāna-kāṇḍīs; no se unen a estos dos partidos. Son muy diferentes.
Adaptado del “The Gaudiya”, volumen 27, número 5
por el equipo de Rays of The Harmonist
Traducción del inglés: Indirā dāsī
Corrección de pruebas: Nandini dāsī